¿Por qué el leasing es una herramienta clave para tu declaración anual?

El leasing, o arrendamiento financiero, es una opción de financiamiento que permite a las empresas adquirir activos sin realizar un gran desembolso inicial. Además de esta ventaja, el leasing ofrece beneficios fiscales importantes que pueden marcar una diferencia en la declaración anual de impuestos. A continuación, en Arrenda1 te explicaremos a detalle cómo el leasing puede ayudarte a optimizar tu carga impositiva, mejorar el flujo de efectivo de tu empresa y maximizar las deducciones fiscales. 

‍¿Qué es el leasing y cómo impacta en la declaración anual de impuestos?

El leasing financiero, o arrendamiento, es un contrato que permite a las empresas utilizar activos como maquinaria, vehículos o equipo de oficina a cambio de pagos regulares. A diferencia de una compra directa, en el leasing el activo no es propiedad de la empresa hasta que finaliza el contrato y ésta decide adquirirlo.

Para empresas de todos los tamaños, el leasing es una estrategia que no solo facilita el acceso a los activos necesarios, sino que también reduce la carga fiscal en la declaración anual de impuestos. Los pagos de leasing pueden ser deducibles, lo cual disminuye la base imponible y, por lo tanto, el monto total de impuestos que la empresa debe pagar.

‍Ejemplo de beneficios fiscales del leasing en la declaración anual

Imagina que eres dueño de una pequeña empresa de panadería con ingresos anuales de 1 millón de pesos. Al adquirir equipo de cocina mediante un contrato de leasing en enero, podrías haber deducido los pagos mensuales en tu declaración anual, reduciendo la carga fiscal de manera considerable. Esto no solo facilita el acceso a la maquinaria necesaria, sino que además optimiza el flujo de efectivo, permitiendo a la empresa reinvertir esos fondos en otras áreas críticas.

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‍Ventajas de los pagos deducibles en el leasing

Uno de los mayores beneficios fiscales del leasing es la deducibilidad de los pagos en la declaración anual. Esto significa que los pagos de arrendamiento pueden deducirse de los ingresos de la empresa, reduciendo la base sobre la cual se calculan los impuestos. En algunos países, incluso el pago inicial de un contrato de leasing es deducible al 100%, lo que representa un incentivo clave para las empresas que buscan reducir su carga fiscal.

‍Leasing y flujo de efectivo: optimización en la gestión financiera

El leasing también es beneficioso para la gestión del flujo de efectivo de una empresa, ya que evita grandes desembolsos iniciales y permite realizar pagos periódicos que son más fáciles de prever y controlar. Este ahorro de capital permite que las empresas utilicen sus recursos en otras áreas estratégicas como innovación, expansión o contratación de personal. Además, la previsibilidad de los pagos del leasing facilita la planificación y proyección financiera de la empresa, aportando estabilidad en la gestión de sus recursos.

‍Ahorro fiscal y ventajas competitivas

Optar por un contrato de leasing puede ser una estrategia fiscalmente eficiente para empresas de cualquier tamaño. Al reducir la carga impositiva y mejorar el flujo de efectivo, el leasing permite a las empresas tener recursos adicionales para invertir en áreas que impulsen su competitividad. Empresas en crecimiento, especialmente pymes, pueden aprovechar esta opción para expandirse sin asumir riesgos financieros excesivos.

‍Consideraciones finales para elegir el leasing

Es fundamental que las empresas consulten con un asesor fiscal para maximizar los beneficios del leasing en su declaración anual. Factores como el tipo de activo, la estructura del contrato y las condiciones fiscales del país pueden influir en los beneficios fiscales obtenidos. Con una planificación adecuada, el leasing puede ser una herramienta valiosa para mejorar la salud financiera y la posición competitiva de tu empresa.

¿Quieres conocer más del leasing y sus beneficios? Contáctanos, con gusto te ayudaremos.

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